''Tus labios no se hicieron para curar tristeza...''
Alfonsina Storni
Íbamos paseando bajo los pinos. Ramitas y piñas bajo nuestros pies nos servían para calentarnos en l’allar. Me vienen tantos recuerdos del verano pasado y canciones que traen calurosas nostalgias. Cuantas sonrisas registraron mis ojos en tu rostro, cuantos momentos vividos en tan poco tiempo. La vida nunca pasa en vano y nos va dejando bolitas de colores en el camino. Son para nosotros, para que las guardemos en nuestro cajón de la azotea, para que nunca se pierdan.
Hoy llega la primavera cargada de tibia lluvia, muchos la estábamos esperando. Se acabará el frío. Se acabarán los días azules en la alcoba naranja. Terminarán las gotitas saladas, los labios caídos, la mirada perdida. Pues con ese calor que llega quiero bañarme en tu profundo océano ocular.
No se si me entiendes. Quizás te sea difícil. Sólo el intento ya me basta. No necesito nada más. Estaba deseando que llegara este día. Quitarme los trapos, sentirme libre y tuya. Dejarte huella. Ver florecer mi jardín, pasear despacito de la mano y pensar que ya nada malo puede pasarme mientras vaya contigo.
Me gustaría que me entendieses. Nadie me había enseñado nunca a ser feliz.
Qué bonito... :)
ResponderEliminarUn beso!
Resumamos tu entrada en una palabra: PRIMAVERA
ResponderEliminarpor fin!!!!!!
(qué bellaS......)
bonita entrada ..como un amanecer al dia siguiente.....buen dia.
ResponderEliminarque bueno.
ResponderEliminarde verdad.
no sé si me entiendes, siempre me ha encantado esa frase, nunca podremos llegar a saber si lo hacen, y duele.
Adoro a la primavera casi tanto como al invierno. Es una mezcla del amado invierno y del detestado verano, que al final, siempre nos acaba conquistando.
ResponderEliminarYo también tengo que dedicar alguna entrada para el comienzo de la primavera en mis blogs, sobre todo en Susurros de amapolas (obvio).
Me has hecho caminar descalza sobre el césped con tu texto :)
Saludos =)
Ains!! Doncs sí!
ResponderEliminarY qué bonitas son las flores!
Espero que en tu jardín sea eterna la primavera.
Primavera :)... tienes a alguien con quien compartirla :D.
ResponderEliminarun abrazo
Hoy encontré una cómo esa entre las páginas de un libro viejo. Dejo unas cuantas cada primavera en volúmenes escogidos al azar... me asusta pensar que no vuelvan a salir de ahí.
ResponderEliminarUn saludo y un canto de ballena. =)
Todos nos merecemos ser felices, y esos pequeños, intensos, profundos, serenos trazos de tiza coloreada sobre tu pizarra, hoy, son más vida que la misma primavera.
ResponderEliminarUn pequeño desacuerdo: ser felices se aprende, pero no se puede enseñar. Es una predisposición autónoma, creo.
Un corazon (un amor) que nos comprenda y nos escuche nunca esta demas.
ResponderEliminarque estes muy bien,
Au revoir.
Qué bonito.
ResponderEliminar:)
Me ha fascinado.
Un beso Virginia!
Estoy maravillada con este blog, empecé con tu entrada y acabé con Paulo Coelho (la columna esta de la derecha una caja de JOYAS)
ResponderEliminarlo dicho
una maravilla darling.
Salud!
¡Hola!
ResponderEliminarTu escrito es muy bello.
Así da gusto contemplar el cambio de las estaciones =o)
Me gustaría que formes parte de una publicación muy especial que hice en mi blog.
¡Gracias!
Un beso,
Pablo